Cómo prevenir accidentes eléctricos en casa

Ana Rodríguez

Actualizado el 14/11/2023 a las 13:06

Para que puedas evitar incendios y electrocuciones en tu hogar, te presentamos el decálogo más práctico, útil, sencillo y efectivo para prevenir accidentes eléctricos en casa: basado en experiencias reales y casos prácticos. Los datos oficiales sobre accidentes domésticos confirman que la prevención está muy lejos de ser efectiva, descubre en qué rutinas debes cambiar para mantenerte a salvo.

Las estadísticas confirman lo que quizás solo sospechabas: los accidentes domésticos relacionados con la electricidad son frecuentes. Incendios y electrocuciones son las consecuencias más habituales, aunque la gravedad varía. Los expertos en seguridad en el hogar insisten en señalar que la prevención es crucial en este tipo de situaciones, evitar la situación de riesgo es la mejor forma de no sufrir un accidente.

Las encuestas y estudios de las compañías aseguradoras que indemnizan a sus clientes a diario por las consecuencias de accidentes domésticos relacionados con la electricidad arrojan interesantes datos sobre las causas mayoritarias de este tipo de situaciones, lo que permite trabajar en la prevención de manera efectiva.

Todo lo que  para prevenir accidentes eléctricos en el hogar

1.-Revisa los interruptores y enchufes

El primer indicador de que una conexión está mal es la presencia de malas conexiones en enchufes o interruptores. Los cables o los mecanismos tanto de las bases de enchufes como de los interruptores pueden ceder o perder su estabilidad con su uso intensivo. Si ves que se producen chispas o rampas o algún sonido raro cuando conectas algo o cuando apagas o enciendes un enchufe, ve con cuidado. Recuerda que una mala conexión, que el cableado esté suelto o que el contacto no sea el correcto puede hacer que pase intensidad de corriente por una sección muy fina, haciendo que se caliente y es muy probable que acabe ardiendo. El coste de sustitución no suele ir más allá de los 10€ más mano de obra y  te puedes ahorrar un incendio en casa.

2.- Atención a las regletas y clásicos ladrones

Está comprobado que en una casa siempre faltan enchufes y las regletas son habituales. Son elementos habituales en los salones, las mesas de estudio y trabajo… No son incompatibles con la seguridad eléctrica en una vivienda, pero es importante usarlas correctamente, con cuidado, sin sobrecargarlas y siempre de calidad.

Se aconseja evitar los alargadores o extensibles, usándolos siempre de manera puntual y bajo vigilancia. Es mejor pensar en poner nuevas tomas eléctricas que usar este tipo de suplementos para llevar corriente a puntos lejanos de tu casa donde necesites enchufar lámparas, ordenadores o cargadores, por ejemplo.

3.-El cuadro eléctrico de tu casa no es parte de la decoración

El Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT) de 2020 marca cómo deben ser las instalaciones y el cuadro eléctrico de una vivienda. Es importante que el tuyo cuente cumpla con la normativa para lo que es imprescindible que cuentes con el servicio de un electricista profesional y con experiencia, pero no todo acaba ahí.

Los habitantes de una casa deben saber cómo funciona, para qué sirve y cómo deben manejar el cuadro eléctrico de su vivienda. Lo más recomendable es que cuando lo instales, le pidas al electricista que te explique y resuelva todas tus dudas, además de indicarte cómo actuar en cada situación referente a posibles bajadas de tensión, cómo cortar la corriente desde el cuadro para hacer pequeños arreglos eléctricos, cómo detectar averías o defectos…. Es importante que conozcas y sepas todo lo necesario de este elemento de tu hogar, es muy importante y crucial para tu seguridad.

4.- Mejora tu marca de pasos diaria: muévete hasta los enchufes y desenchufa siempre

Tirar del cable es una nefasta costumbre igual que dejar las cosas enchufadas por horas, aunque no se vayan a usar. Este consejo aplica especialmente para secadores de pelo, planchas o tostadores; es importante no solo apagarlas, sino siempre desenchufarlas.

Los electricistas alertan de la importancia de desenchufar los aparatos electrónicos cogiendo por la zona de plástico y perfectamente aislada, ejerciendo la presión justa y precisa para poder sacarlo con seguridad y sin que el cable sufra. Además de ser más seguro, estas alargando la vida útil de tus aparatos eléctricos, evitando daños y averías.

5.-No cuelgues cuadros ni fotos ni espejos nuevos tampoco soportes para teles u otros aparatos

Taladrar la pared es el típico trabajo de bricolaje con el que todo el mundo se atreve; es sencillo y las máquinas actuales son seguras y fáciles de manejar. Pocos relacionan este tipo de actividades: hacer un agujero para colgar un cuadro, el nuevo soporte para la tele o el proyector con un accidente eléctrico y sin embargo, es bastante habitual.

El problema está en que el cableado de las casas está oculto tras las paredes y al taladrar a ciegas –no sabes los cables, tubos o suministros que ocultan tus paredes o tabiques- puedes tener la mala suerte de tocar uno de estos cables con el consecuente peligro y ocasionando una importante avería eléctrica. No corras riesgos y si tienes dudas, utiliza un detector de electricidad para saber en qué paredes y en qué lugar es seguro taladrar.

6.- La instalación eléctrica sí necesita revisiones y mantenimiento, aunque no sea obligatoria

Hay instalaciones de suministros domésticos, como el del gas, que por ley deben pasar revisiones periódicas. No es el caso de la luz y sin embargo, los expertos insisten en la importancia de tener una instalación siempre en perfecto estado para evitar accidentes como incendios o cortocircuitos que pueden tener consecuencias muy graves.

Si quieres evitar accidentes eléctricos y minimizar el riesgo, tú mismo puedes imponerte un calendario de revisiones eléctricas en tu casa en los que debes observar todas las tomas, revisar el estado de los enchufes, lámparas, bombillas… Si tienes dudas o sospechas que algo no va bien, no dudes en pedir a un electricista que efectúe una revisión completa y profunda.

7.- El cable es barato, mejor no lo repares ni lo uses en mal estado

Los cables de los aparatos no deben alargarse, ni empalmarse con celo, esparadrapo o similares… De hecho, si quieres evitar riesgos, lo mejor es no tocar los cables de tus electrodomésticos o cargadores, mejor que reparar o alargar renuevalos al completo.

Los cables pelados, con zonas no aisladas o con manchas no deberían usarse, el peligro es inminente y no es buena idea enchufar ningún aparato que no tenga el cable en perfecto estado. Revisa y cuida los cables de tus aparatos para que sean seguros y te duren mucho tiempo, recogelos siempre correctamente sin nudos ni retorcidos.

8.- ¿El agua siempre apaga el fuego?

La realidad es que el agua sobre el fuego casi siempre es una mala idea y a menudo, el peor de los recursos. En el caso de que se declare un incendio accidental en tu casa en un enchufe, un cable… cualquier fuego relacionado con electricidad es muy mala idea intentarlo apagar con agua.

Para poder sofocar un fuego fortuito en un enchufe o en un cable; lo más seguro y efectivo es contar con un extintor específico para este uso. Es buena idea tener siempre uno en perfecto estado y a mano en casos.

9.- No ahorres tiempo al cambiar las bombillas

Algo tan sencillo y cotidiano como cambiar una bombilla, puede acabar en un grave accidente doméstico o por lo menos, un susto importante. Es mejor ser prudente, emplear el tiempo preciso y no saltarse pasos ni precauciones por las prisas. Recuerda mejor cortar la corriente antes de manipular el casquillo tanto para retirar la vieja como para poner la nueva. Asegúrate de que la bombilla queda perfectamente encajada y enroscada.

Otro problema habitual es no elegir las bombillas adecuadas a la lámpara, es muy importante respetar las potencias recomendadas por el fabricante para evitar peligrosos sobrecalentamientos que pueden acabar en incendios en los momentos menos esperados.

10.- Las alfombras no sirven para ocultar cables: prima la seguridad sobre la estética

No es aconsejable dejar cables atravesando por zonas de paso como pasillos, distribuidores…. Tanto los más pequeños como los más mayores o las mascotas y en un despiste cualquiera puede caerse y arrancar el enchufe, ocasionando un grave trastorno eléctrico, además de accidentarse la propia persona.

Los cables tampoco deben ocultarse ni debajo de alfombras ni cerca de cortinas, colchas o fundas nórdicas en caso de que un chispazo se produjera y encontrará cualquier tipo de textil a su paso el incendio se propagaría rápidamente. Guardarlos bajo los muebles o detrás de ellos tampoco es lo más seguro, si se dañan no podrás verlo hasta que quizás sea demasiado tarde.

Con un poco de observación y adquiriendo sencillas rutinas de prevención como las que acabamos de referirte en este decálogo contra accidentes eléctricos, tu hogar será un lugar mucho más seguro en el que los incendios o los daños personales o materiales provocados por fallos eléctricos serán mucho menos probables.