Jose Romero
Siempre es posible cambiar la compañía de seguros de cualquiera de tus pólizas. No es un trámite complicado, aunque puede parecerlo, si nunca se ha hecho. Las encuestas del sector confirman que la mejora del precio es la principal razón para cambiarse de compañía. Despejamos todas tus dudas y te explicamos cómo cambiar de compañía de seguros para no tener ningún problema.
No importa la compañía ni el tipo de seguro que quieras migrar a otra aseguradora, es igual tanto para los seguros de coche, casa o vida, entre otros. Todos pueden cambiarse y todos están sujetos a una serie de derechos y obligaciones que atañen a la aseguradora y al titular del seguro. Cambiar de aseguradora es posible y fácil, pero debes hacerlo conforme a las reglas establecidas para no tener problemas o asumir pérdidas económicas.
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¿Qué hacer para cambiar de compañía de seguros?
No te preocupes porque es mucho más sencillo de lo que pueda parecer y solo necesitas estar correctamente informado, conociendo los detalles importantes: plazos y formas. Hay una normativa legal sobre las condiciones del cambio de un seguro que puede consultarse en cualquier momento para saber qué hay que hacer.
Lo fundamental es lograr la baja en la aseguradora anterior para poder darse de alta como nuevo cliente en la nueva. Gracias a las herramientas digitales y a la atención telefónica actual que ofrecen todas las grandes compañías de seguros hoy, es cómodo y rápido, además de fácil.
Primer paso: consulta tu póliza.
Las pólizas de todos los seguros son contratos que se firman entre la compañía y el asegurado, como es lógico suponen derechos y deberes por ambas partes. Todo queda reflejado en el contrato tanto las condiciones generales como los detalles y las posibles cláusulas concretas en cada caso.
Es importante cuando se firma un seguro leer detenidamente el contrato, despejar todas las dudas y nunca firmarlo si quedan temas sin resolver o hay algo que no encaja. En este momento ya es posible saber cómo hay que actuar en caso de que se quiera dar por finalizado este contrato y cambiar de aseguradora. Por lo tanto, la póliza del seguro que quieres cambiar es el primer documento que debes consultar para saber cómo iniciar este tipo de trámite.
Segundo paso: conoce la ley
Todos los seguros en España están sujetos a la Ley 50/1980, de 8 de octubre, de Contrato de Seguro. En este texto legal se recoge todo lo necesario para regular este tipo de contratos en todas sus variedades y versiones. Consta de ciento nueve artículos, organizados en cuatro títulos dedicados a los diferentes tipos de seguros, condiciones generales y otros detalles importantes que atañen a todos los seguros.
Las condiciones para un cambio de seguro también están recogidas, además de los detalles, como plazos y formas que deben respetarse en cualquier póliza correcta y legal. La Ley del Seguro es la fuente que puedes consultar, si tienes dudas o piensas que tu compañía te está imponiendo condiciones no legales para el cambio.
En la sección cuarta del Título primero: duración del contrato y prescripción y en concreto, en el artículo 22 se hace referencia expresa al tema de la duración y la prorrogación – o no- de la póliza. Ten en cuenta que este apartado ha cambiado, la modificación es válida desde el 1 de enero de 2016, cuando entró en vigor la Nueva Ley del Seguro, Disposición Transitoria Decimotercera de la Ley 20/2015 de 14 de julio de ordenación, supervisión y solvencia de las entidades aseguradoras y reaseguradoras, modificando precisamente el artículo 22 de La Ley 50/1980 de 8 octubre del Contrato de Seguro.
Anteriormente, los contratos de seguros se renovaban automáticamente cada año, salvo comunicación en contra: “Las partes pueden oponerse a la prórroga del contrato mediante una notificación escrita a la otra parte, efectuada con un plazo de dos meses de anticipación a la conclusión del período del seguro en curso.”
La actual legislación, por el momento, da más derechos al titular del seguro, precisamente para que pueda hacer un trámite como el del cambio de compañía con mayor facilidad y menos trabas.
Tercer paso: ¿Cuándo puedo hacer el cambio de compañía?
La normativa legal, como acabamos de referir en el punto anterior, fija cómo y cuándo puedes pedir a tu compañía la no renovación de tu póliza, es decir, la baja, como trámite imprescindible, para pasar a formar parte de otra compañía.
La ley es muy concreta y confirma que la duración del contrato se determina en la póliza que no puede fijar un plazo superior a diez años. Sin embargo, sí es posible establecer que se prorrogue una o más veces por un período no superior a un año cada vez.
Cuarto paso: ¿Cuánto tiempo tengo?
La normativa sigue siendo el referente para guiarte en este trámite y que no faltes a la legalidad para que tus derechos sean respetados: “Las partes pueden oponerse a la prórroga del contrato mediante una notificación escrita a la otra parte, efectuada con un plazo de, al menos, un mes de anticipación, a la conclusión del período del seguro en curso, cuando quien se oponga a la prórroga sea el tomador, y de dos meses cuando sea el asegurador”.
Si quieres cambiar de compañía, es necesario que le indiques a tu compañía tu intención con, al menos, un mes de antelación sobre la fecha en la que tendría que renovarse en su caso la póliza por un nuevo año.
Igualmente, la aseguradora debe informarte de forma expresa, detallada y concreta cualquier cambio y modificación del seguro con, al menos, dos meses de antelación sobre la fecha de renovación.
Quinto paso: atención a las formas son muy importante
El cambio de aseguradora es un derecho que tiene todo titular de un seguro, como hemos confirmado hasta ahora; sin embargo, también ha quedado claro que este derecho debe ejercerse conforme a la ley vigente que es muy concreta. Además de cumplir los plazos, como se concretaban en el paso anterior, no debes pasar por alto el modo en el que comunicas este deseo de cambio y no renovación.
La notificación debe hacerse de forma escrita. Los abogados expertos en este sector confirman que este es un punto fundamental para ahorrar problemas y poder responder con total seguridad ante posibles reclamaciones o requerimientos judiciales de la compañía.
Lo mejor, aunque supone un pequeño coste económico, es recurrir a una carta certificada o cualquier otro modo que suponga que el receptor deba aceptar y confirmar que ha recibido la información.
Es importante que tengas un documento veraz y oficial con el que puedas demostrar que has comunicado a tu aseguradora tu interés por no renovar la póliza. Por supuesto, tanto tu comunicación como el acuse de recibo de la compañía deben tener fecha y firma oficial –o verificación digital- para que sea válido y demuestre que has cumplido con los plazos para ejercer tu derecho de no renovación y cambio de compañía.
Con tu baja notificada y confirmada por la aseguradora de la que te vas, solo resta que la nueva aseguradora te haga cliente, todas las compañías se encargan de este trámite sin problemas y ofreciendo a sus nuevos clientes máxima comodidad para evitarles más preocupaciones.
Sanciones y penalizaciones al cambiar de seguros
Ahora que ya sabes cómo puedes cambiar de seguro paso a paso, sin problemas y con total facilidad; puede que aún te preguntes o alguien te haya contado que las aseguradoras pueden penalizar este tipo de cambios. La realidad es que no, pero te explicamos los detalles.
La mayor parte de las compañías aseguradoras informan de forma puntual a sus asegurados antes de que llegue la fecha de renovación sobre los nuevos detalles de su póliza y sobre cuál será la prima para el nuevo año. Cuando recibes esta información, tienes tiempo para buscar alternativas en otras aseguradoras o pedir más información a la propia. En caso de tener tomada la decisión de cambiar es el momento adecuado para empezar con el paso a paso y notificar tu deseo.
Siempre que el contrato de la póliza se anule en forma y tiempo previsto no existen penalizaciones ni multas por cambiar de aseguradora. Otro escenario muy distinto es si durante el tiempo de vigencia de la póliza –que además ya tendrás pagada- quieres darte de baja para irte a otra compañía de seguros; por lo general, está es una situación que no está prevista ni permitida.
Aunque siempre es posible consultar cada caso particular con la propia compañía y/o con un profesional experto en este campo, no es habitual que te interese romper un contrato de seguro vigente que tienes pagado y te cubre… No suele ser viable recuperar la prima ni parte de ella. Aunque logres la baja y te des de alta en otra, siempre es una situación que conlleva la pérdida económica de la parte que no disfrutas por romper de forma bilateral tu contrato con la aseguradora. Desde un punto de vista teórico, si no logras la baja de tu antigua compañía y te das de alta en la nueva, estás pagando dos veces por asegurar un mismo periodo de tiempo, lo que no suele ser rentable.
Resumen en 5 pasos para saber cómo cambiar de compañía de seguros
- Revisa la póliza de seguros: contrato y sus condiciones.
- La Ley 50/1980, de 8 de octubre, de Contrato de Seguro es la referencia que regula este trámite también.
- El cambio debe hacerse en lugar de la renovación. Coincidiendo en fecha con ese momento.
- Debes notificar, con al menos un mes de anticipación respecto a la fecha de notificación, tu deseo a la compañía.
Ejemplo: Si tu póliza de coche se renueva cada año el 4 de noviembre, el 4 de octubre como muy tarde –mejor hazlo antes- has tenido que informar a tu aseguradora.
- Informa a tu aseguradora por escrito y de forma fehaciente, obteniendo respuesta expresa de la misma. Informa a la nueva compañía para que se tramite el alta.
Cambiarse de aseguradora para ahorrar dinero o por cualquier otra situación es un trámite que como acabamos de explicar puedes hacer sin grandes complicaciones, en poco tiempo y con los mejores resultados. Solo tienes que atender a las fechas y consultar tus pólizas siempre para saber cuándo es el momento idóneo para hacerlo.
